Barcelona, 6 de noviembre de 2014
Apreciados compañeros,
En primer
lugar destacar la interesante consulta vinculante de la Dirección General de
Tributos de fecha 16/09/2014, número de resolución V2436/14 que trata sobre la
incidencia fiscal de la devolución del
céntimo sanitario.
Respecto al Impuesto de Sociedades la devolución del IVMDH, contabilizado en su día como gasto, debe imputarse como ingreso en la base imponible del Impuesto sobre Sociedades del ejercicio en que se reconoce el derecho a su devolución.
Los intereses de demora que, en su caso, se hubieran reconocido sobre la referida devolución, tendrán el mismo tratamiento.
En consecuencia, no habrá que presentar ninguna declaración complementaria, vista la definición de éstas en el artículo 122 de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria, BOE de 18, en adelante LGT, ya que los ingresos derivados de las devoluciones del IVMDH objeto de la consulta deberán imputarse a los periodos impositivos que se reconozca el derecho a su devolución, debiendo ser declaradas en sus correspondientes autoliquidaciones.
Respecto
al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).
Tener
en cuenta el requisito establecido en el número 4º del artículo 14.2 del RRVA
relativo a que el obligado tributario que haya soportado la repercusión solo
tendrá derecho a obtener la devolución de ingresos indebidos cuando no tuviese
derecho a la deducción de las cuotas soportadas. En el caso de que el derecho a
la deducción fuera parcial, la devolución se limitará al importe que no hubiese
resultado deducible.
De lo anterior resulta que si el contribuyente se dedujo las cuotas soportadas del IVA en la compra de combustible, no procederá la devolución de ingresos indebidos.
En
segundo lugar destacar dos interesantes consultas del ICAC sobre el
arrendamiento de inmueble con opción a compra y el canon de entrada en una
franquicia.
Nº de Consulta:
6
Nº de BOICAC:
99/SEPTIEMBRE 2014
Contenido:
Arrendamiento de inmueble con opción de compra. NRV 8ª.
Consulta:
Sobre la contabilización de un contrato de arrendamiento de inmueble con
opción de compra.
Respuesta:
La consulta formulada versa sobre el adecuado tratamiento contable a
aplicar a un acuerdo de “arrendamiento de inmueble y opción de compra”, por el
cual un edificio propiedad de la entidad A es arrendado a la entidad B bajo las
siguientes condiciones: a) La entidad B (arrendataria) pagará una renta
mensual, equivalente al importe de la cuota mensual que la entidad A
(arrendadora) viene obligada a pagar a la entidad bancaria que le prestó la
financiación para adquirir dicho inmueble. b) La entidad A otorga a la entidad
B una opción de compra, con un plazo máximo de ejercicio de cinco años que
coincide con la duración del arrendamiento. c) No se establece precio por la
opción de compra, pero sí el precio de venta del edificio en caso de ejercicio
de la opción, que se acuerda en un importe determinado considerándose a cuenta
del mismo las cantidades que la entidad B haya efectuado en concepto de
arrendamiento, por lo que, en caso de ejercerse al final del periodo señalado,
la cantidad restante a pagar por el valor residual del edificio sería dicho
importe menos las cuotas satisfechas. En particular, la consultante solicita
confirmación sobre “si como parece, en virtud del citado acuerdo y de la norma
8ª.1 de valoración del Plan General de Contabilidad, aprobado por el RD
1514/2007, dicha propiedad debería de registrarse en la contabilidad del
arrendatario, como consecuencia de la asunción de riesgos de la misma por dicha
sociedad. Al mismo tiempo, el arrendador, debería darla de baja contablemente,
registrando el correspondiente resultado contable.” La opinión de este
Instituto sobre el criterio aplicable a los acuerdos de arrendamiento de
inmuebles con opción de compra está publicada en la consulta 5 del BOICAC nº
78, de junio de 2009, donde se aclara que cuando de las condiciones económicas
de un acuerdo de arrendamiento, se deduzca que se transfieren sustancialmente
todos los riesgos y beneficios inherentes a la propiedad del activo objeto del
contrato, dicho acuerdo deberá calificarse como arrendamiento financiero. En
particular, en un acuerdo de arrendamiento con opción de compra, se presumirá
que se transfieren sustancialmente todos los riesgos y beneficios inherentes a
la propiedad, cuando no existan dudas razonables de que se va a ejercitar dicha
opción. A tal efecto, desde una perspectiva económica racional, ese requisito
se debería entender cumplido si el valor razonable del activo en la fecha de
ejercicio de la opción supera, de manera significativa, el precio acordado por
la transferencia del activo, circunstancia que corresponde evaluar a los
administradores de la sociedad, pero que cabría presumir en el supuesto de que
dicho importe fuese equivalente al valor razonable del inmueble en la fecha de
la firma del acuerdo de arrendamiento menos las mensualidades que el
arrendatario abone hasta el ejercicio de la opción.
Nº de Consulta:
4
Nº de BOICAC:
99/SEPTIEMBRE 2014
Contenido:
Canon de entrada a una franquicia. NRV 5ª.
Consulta:
Sobre la contabilización del importe satisfecho en concepto de canon de
entrada a una franquicia.
Respuesta:
La consulta versa sobre el tratamiento contable del importe satisfecho por
el franquiciado en contraprestación del canon de entrada a una franquicia, cuyo
contrato tiene una duración de cinco años y es prorrogable por acuerdo de ambas
partes. La Resolución de 28 de mayo de 2013, del Instituto de Contabilidad y
Auditoría de Cuentas, por la que se dictan normas de registro, valoración e
información a incluir en la memoria del inmovilizado intangible, regula en el
punto 7 de su noma sexta los contratos de franquicia en los siguientes
términos: “7. Contratos de franquicia. 1. La actividad comercial en régimen de
«Franquicia», es aquella que se realiza en virtud del contrato por el cual una
empresa, el franquiciador, cede a otra, el franquiciado, en un mercado
determinado, a cambio de una contraprestación financiera directa, indirecta o
ambas, el derecho a la explotación de una franquicia, sobre un negocio o
actividad mercantil que el primero venga desarrollando anteriormente con
suficiente experiencia y éxito, para comercializar determinados tipos de
productos o servicios y que comprende, por lo menos: a) El uso de una
denominación o rótulo común u otros derechos de propiedad intelectual o
industrial y una presentación uniforme de los locales o medios de transporte
objeto del contrato. b) La comunicación por el franquiciador al franquiciado de
unos conocimientos técnicos o un saber hacer, que deberá ser propio, sustancial
y singular, y c) La prestación continúa por el franquiciador al franquiciado de
una asistencia comercial, técnica o ambas durante la vigencia del acuerdo; todo
ello sin perjuicio de las facultades de supervisión que puedan establecerse
contractualmente. 2. El importe satisfecho en contraprestación del canon de
asociación a una franquicia se contabilizará como un inmovilizado intangible
cuando se cumplan los requisitos establecidos a tal efecto en el apartado 2.1
de la norma segunda de la presente Resolución. Si los términos del acuerdo
obligan a la empresa a realizar pagos anuales al franquiciador a lo largo de la
vida del contrato, el valor actual de los citados compromisos no se incluirá en
el precio de adquisición del activo salvo que a la vista de los términos del
acuerdo exista un arrendamiento financiero implícito de un inmovilizado
material, en cuyo caso la operación deberá contabilizarse de acuerdo con la norma
de registro y valoración del Plan General de Contabilidad sobre arrendamientos
y operaciones de naturaleza similar. 3. Este derecho deberá amortizarse de
forma sistemática durante el periodo en que contribuya a la obtención de
ingresos, no pudiendo exceder el plazo de duración del contrato de franquicia,
teniendo en cuenta, en su caso, las posibles prórrogas que se pudiesen acordar.
4. Si a lo largo de la vida del contrato existiesen dudas sobre la recuperación
del activo, circunstancia que deberá quedar claramente especificada en la
memoria de las cuentas anuales, se deberá registrar la oportuna corrección
valorativa por deterioro.” A efectos del criterio de reconocimiento, en la
norma segunda de la citada Resolución, se establece: “Segunda. Criterio general
de reconocimiento: identificabilidad. 1. Reconocimiento inicial. 1. El
reconocimiento inicial de un inmovilizado de naturaleza intangible requiere
cumplir los criterios generales recogidos en el Marco Conceptual de la
Contabilidad del Plan General de Contabilidad. Es decir, cumplir la definición
de activo y los criterios de reconocimiento, sin perjuicio de los criterios
especiales recogidos en la presente Resolución para los gastos de
investigación. 2. El registro de un inmovilizado intangible procederá cuando,
cumpliéndose la definición de activo del Plan General de Contabilidad, se
cumplan los siguientes criterios: a) Sea probable la obtención a partir del
mismo de beneficios o rendimientos económicos para la empresa en el futuro; y
b) se pueda valorar de manera fiable. 2. Identificabilidad. 1. Adicionalmente,
para reconocer un inmovilizado de naturaleza intangible es preciso que se
cumpla el criterio de identificabilidad, lo cual implica que el activo reúna
alguno de los siguientes requisitos: a) Ser separable, es decir, susceptible de
ser separado o escindido de la entidad y vendido, cedido, dado en explotación,
arrendado o intercambiado, ya sea individualmente o junto con el contrato,
activo o pasivo con los que guarde relación. b) Surgir de derechos legales o
contractuales, con independencia de que tales derechos sean transferibles o
separables de la empresa o de otros derechos u obligaciones. (….)” De acuerdo
con lo indicado, la calificación contable del importe satisfecho por la empresa
franquiciada en concepto de canon de entrada vendrá condicionada por su
proyección económica futura. Es decir, por su contribución a la obtención de
ingresos futuros y su recuperación, desde una perspectiva económica racional, a
lo largo de un determinado periodo de tiempo. Si estas circunstancias
concurren, deberá calificarse como un activo y, en particular, como un
inmovilizado intangible que con posterioridad a su reconocimiento inicial será
objeto de amortización y, en su caso, corrección valorativa por deterioro. A la
vista de la información facilitada en el escrito de consulta, salvo mejor
evidencia de lo contrario, la vida útil del activo será de cinco años
Para cualquier duda o aclaración
contactar con josepmpanyos@yahoo.es
José M Paños
Pascual
Abogado/ gestor
administrativo
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